A raíz de la carta abierta que difundió la docente de música Analía Schwartz, luego de ser absuelta por la justicia de la acusación de abusos sexuales y corrupción de menores, los padres denunciantes respondieron.

Lejos de caer en las constantes provocaciones públicas, los padres de las víctimas del caso Gianelli -Fleming queremos dejar en claro  que el escarnio mediático de esta causa no fue provocado por nosotros, de más está decir que sólo con googlear el nombre de la imputada o “caso Gianelli” salen cientos de notas dadas por la defensa, marchas inducidas por la misma imputada en sus grupos de apoyo y hasta con el confeso por ella misma, perfil falso desde donde arengaba a los docentes a marchar en favor de ella a las puertas de tribunales.

Ante la instalación mediática del tema fuimos los padres quienes para preservar la identidad de nuestras familias tuvimos que solicitar a los jueces que se tomen medidas, como así también fuimos nosotros quienes, ante una nota de opinión de la Dra. Perello a los medios que revelaba detalles específicos de parte de los relatos de los menores, en su momento hicimos las denuncias ante el tribunal y en el colegio correspondiente.

Pero no por hacer lo correcto, no por mansos vamos a permitir que se nos siga faltando el respeto.

Como familias víctimas de este hecho aberrante hemos vivido un calvario, el poder judicial con sus idas y vueltas, con sus inconsistencias y desaciertos ha revictimizado una y otra vez a nuestros hijos y ahora la opinión pública instada por una serie de notas que no hacen sino parcializar la mirada  y tergiversar la realidad a una especie de novela donde el victimario padeciente pasa a ser víctima de un fenómeno social, es de libro .

Basta de mentir, de utilizar haters para agredir y ensuciar, para buscar notoriedad,  dejen de presionar a la justicia para que resuelva a su favor.

No vamos a caer en la bajeza de la macabra provocación ideada por la defensa de Schwartz para buscar notoriedad mediática.

Si estas provocaciones continúan vamos a accionar legalmente en protección de nuestros hijos menores de edad bajo las leyes y tratados que los protegen de toda esta demostración mediática para con ellos y nuestras familias.


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