Por: Gastón Herrera, ex Director de la Oficina de Protección Integral a la Víctima
Por el mes de diciembre la tragedia del fuego preocupaba a toda la ciudad de Mar del Plata y en particular a las familias que habitaban las viviendas dónde se ubicaba el comercio en el que se inició tamaño incendio.
Rápido de reflejos y cumpliendo con su compromiso de estar al lado de los vecinos el Intendente Guillermo Montenegro se hizo presente de manera inmediata en el lugar, coordinó con los equipos de trabajo (defensa civil, bomberos, etc) y conversó con los danmificados para garantizar la contención y el acompañamiento desde el Estado Municipal.
Pasaron las primeras horas, los primeros días, ya mas de un mes y por alguna razón, que no es otra cosa que la ausencia del Estado en la contención y acompañamiento socio-sanitario los damnificados como el caso de Liz aparecen en televisión tras un graff que dice «Atrincherada para evitar la demolición».
Las personas que padecen tragedias requieren que el Estado en representacion de la sociedad este presente para asistir, contener y evitar la re-victimización de las mismas.
Desde el 2013 el municipio de General Pueyrredón cuenta con una Dirección General de Protección Integral a la Víctima, lamentablemente la gestión anterior la pasó a la órbita de Desarrollo Social (creyendo que las victimas del delito, siniestros viales, la violencia y tragedias requieren de asistencialismo) y dicha oficina dejo de estar a lado de los que padeciendo situcianes de angustia y dolor necesitan de la presencia del Estado.
Espero y deseo que el actual Intendente jerarquize el área, la devuelva a la Secretaria de Seguridad le de los recursos necesarios para que en caso de que en la ciudad (Dios no permita) haya alguna tragedia no tengamos que ver en los medios «Víctimas Atrincheradas» ni «Víctimas Abandonadas».