Por: Roberto Garrone

Con agenda liberada tras acatar sin chistar la orden superior que lo bajó de la misión oficial y dejar en orfandad institucional al grupo de empresas pesqueras que por estos días participaron de la Feria “China Fisheries And Seafood”, Juan Antonio López Cazorla visitó esta semana en Mar del Plata las salas de reuniones de las principales cámaras del sector.

La comunión de los libertario con el gobierno de Donald Trump que propició el auxilio financiero, clave para que el dólar no salte la banda y pudieran gozar de su domingo de resurrección política, en materia pesquera ya modificó el escenario de gestión y el vínculo con el principal destino de las exportaciones de la industria.

Y no porque el Subsecretario haya dejado de acompañar a CAPIP en la firma de un acuerdo con Bright Food. En definitiva era un “inicio de vinculación”, como definieron desde la propia cámara, con la empresa multinacional, la segunda mayor de Shanghai en la fabricación de bebidas y alimentos.

Si el langostino entero congelado a bordo tiene que penetrar nuevos nichos de mercado, que ponderen su valor diferencial con el vananamei parecer que no será China. Veremos si a cambio de las “tierras raras” que vendrán a buscar los estadounidenses se incluye una baja en los aranceles del 10% que paga el marisco por llegar a su mercado.

En la reunión con armadores la agenda fue variada. Juan Antonio anticipó un incremento en el porcentaje de by catch permitido para el abadejo y hasta proyectaron una futura prospección.

Pero no se tocó un tema que despierta el interés de varios y que hasta no hace mucho aparecía en el radar de la gestión: los nuevos permisos de pesca para calamar que implicaba la incorporación de nuevos buques poteros a la lista de operadores habilitados dentro de nuestra zona económica exclusiva.

Si bien no estaba claro cuántos eran –algunos referían 20 y otros apenas la mitad- todo estaba abrochado para que saliera antes de fin de año: incluso el monto del retorno y hasta quienes serían los recaudadores.

Ya Miguel Bustamante le había dado los toques finales a la Resolución habilitante y Otto en el INIDEP estaba predispuesto para sumar el aval científico indispensable que iba a requerir el Consejo Federal Pesquero.

La cancelación deja a varias empresas argentinas con ganas de sumar un potero a su integración productiva pero apunta claramente a frenar el crecimiento de las empresas chinas que pescan tanto dentro como fuera de nuestra zona económica exclusiva, algo que preocupa desde hace mucho a Estados Unidos.

Las nuevas licencias de pesca serían acaparadas mayoritariamente por firmas vinculadas con el gobierno chino y eso implicaría una concentración mayor a la existente. De los 78 permisos actuales, más de 65% corresponde a capitales chinos. Por caso “Fénix Internacional” y “Pesquera Latina” cuentan con una docena de barcos cada una.

Varios de estos barcos aguardan el inicio de la zafra 2026 amarrados en el puerto de Mar del Plata. No fue una semana fácil para el presidente del Consorcio Portuario, Marcos Gutiérrez. No es un semestre fácil podríamos ampliar.

Funcionario de Axel Kicillof en la gobernación bonaerese, en la interna peronista responde Fernanda Raverta, líder de la Cámpora en la Quinta Sección.
La relación entre ambos líderes terminó de romperse antes de que terminaran de contar los votos el domingo y esa grieta podría devorarse su cargo al frente del Consorcio.

No es lo único. Fue blanco de las críticas por el pliego de la licitación para la terminal de contenedores que formularon desde distintos sectores de la estiba. Y coronó con la cancelación de la naviera CMA una de las dos que entraban de manera frecuente al puerto

Vamos por partes… Arranquemos por esto último. El portazo de CMA parece ser un “hasta el mes que viene”. La naviera que estuvo más de 40 días sin entrar al puerto a principios de año, tiene programado un ingreso para la primera quincena de diciembre.

Es real la falta de compromiso de Lamb Weston. Primero fue la demora en el inicio de la producción, luego la excusa fue la caída de ventas en su principal mercado. Ahora se conoce que algunos compradores de Brasil prefieren el camión puerta a puerta. Lejos de mejorar, la huella de carbono que iban a bajar al exportar por Mar del Plata, va a engordar bastante.

Pero también hubo inconsistencias en la naviera francesa. Nunca mostraron un real interés en levantar otras cargas. En esto debe haber pesado el constante cambio de sus cuerpos directivos en la región. Desde el CEO hasta oficiales de ventas.

Es sabido que TC2 tiene un contacto fluido con MSC, una alternativa de reemplazo, pero mientras no se defina lo del pliego no hay chances que esas buenas intenciones se cristalicen en una negociación seria por las tarifas.

MSC fue la naviera que volvió a poner a Mar del Plata en la hoja de ruta de los contenedores allá por febrero del 2015 luego de más de 3 años de estar tapados de arena. Y la que se fue a los pocos meses por un nivel escaso de cargas. Poco cambió en estos últimos 10 años.

El portazo mensual de CMA tal vez sirva de llamado de atención para que el resto de los actores reaccione. La Provincia gastó una fortuna en el camino de la circunvalación para que, en buena parte, Lamb Weston, tenga una logística más eficiente y segura, y las papas fritas salen por camión pero hacia Buenos Aires. Igual los que llegaron al puerto viajaron por Juan B Justo, digamos todo.

Pocos han visto el pliego de la licitación de la terminal. No solo hay preocupación por la condición laboral de los estibadores. Otros advierten que triplicaría los costos portuarios, que hoy ya son altísimos.
“Mar del Plata no tiene el movimiento de cargas que se necesitan para amortizar las inversiones que pide el pliego”, dijo Carlos Mezzamico, referente de los estibadores, cuya condición laboral con quien pudiera ser adjudicado quedaba en un peligroso limbo.

También cuestionó el pliego TC2. Desde la terminal ya avisaron que recurrirán a la justicia porque las condiciones exigidas no permiten que puedan hacer uso del derecho de preferencia ante una oferta superadora de otros oferrentes.

El 10 de noviembre se pensaban abrir los sobres con las ofertas. Quizás ese plazo se postergue. En la reunión de este viernes el Directorio pareció dar un paso clave en ese sentido; abrir un paréntesis de 40 días para aclarar las dudas.

Para ir terminando… Descreo del rumor en danza, de que Gustavo Pulti va a reemplazar a Gutiérrez en el Consorcio Portuario. En otros puertos ha funcionado eso de que el sillón del Consorcio sea un buen trampolín para saltar al de la Municipalidad. Arturo Rojas y Federico Susbieles dan fe en Necochea y Bahía Blanca.

Acá en Mar del Plata nunca funcionó ese experimento: tal vez porque más allá de los discursos pomposos, somos una terminal casi intrascendente en el mapa nacional. La historia reciente marca que Mario Del Ollio, Sergio Fares o hasta Eduardo Pezzati lo intentaron en vano. Apenas llegaron, algunos, al premio consuelo de anodinos concejales.

Tal vez el problema sea la propia política y esa visión miope que alcanza para colgarse a los contenedores cuando llega CMA y Lamb Weston era todo promesas, y ahora ni aparecen para compartir el fracaso. Nunca es inoportuno recordar que por el puerto local no se exporta ni el 20% de todo lo que genera la propia industria pesquera.

En materia portuaria las dos certezas que muchos dan por hecho por estas horas es la salida de Juan Cruz Lucero como autoridad provincial. “No hay uno que no lo critique”, confió un analista desde La Plata. La otra es que Sergio Massa pidió reserva de lugar para la ahora diputada Jimena López en Quequén. ¿También pidió por el sillón de Mar del Plata?

Creo que Pulti tiene otras opciones para intentar volver al Palacio Municipal en 2027. La banca de concejal o los dos años que le quedan como diputado provincial. Él parece saberlo… como sabe de su poder de influencia sobre Axel para completar algunos casilleros políticos de la provincia en el tablero marplatense.

Por eso es que impulsa el regreso de Gabriel Felizia a la administración portuaria. Podría ser la tranquilidad que todos los críticos de la licitación de la terminal de contenedores esperan. Durante sus cuatro años de gestión, el pliego nunca salió de la categoría “borrador”.

Buen domingo


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