Desde hace tres semanas, Mar del Plata, Batán y Sierra de los Padres se ven imposibilitados de contar con el servicio nocturno de colectivos por una medida de fuerza gremial, en connivencia con el sector empresarial.
Desde el pasado 22 de junio la Unión Tranviarios Automotor (UTA) dispuso una retención de tareas de 22 a 6, en reclamo por la suspensión de choferes por parte de las empresas.
Sin embargo, se conoció que la protesta cuenta con el aval del sector empresarial como una medida de «presión» para que el municipio otorgue una suba del boleto y la Provincia y Nación dispongan de mayores subsidios al sector.
Mientras tanto, la postura del gobierno municipal no ha pasado de ser tibia, señalando que se labraron actas a las empresas por el incumplimiento en el servicio que no ha causado ningún efecto y la retención de tareas ya cumple 21 días.
Vale señalar que, en el medio, se sucedieron un par de jornadas de paro total del servicio por medidas de alcance nacional y una interna sindical que derivó en el bloqueo de la cabecera de la empresa 25 de Mayo que dejó a la ciudad sin colectivos durante cinco días.
Mientras tanto, el conflicto no tiene miras de solución y los usuarios siguen padeciendo un servicio cada vez más decepcionante.