La relación entre el Sindicato de Trabajadores Municipales y el Intendente Guillermo Montenegro sumó, este miércoles, otro capítulo de desencuentros y marcadas diferencias.
Los Municipales llevaron a cabo una concentración frente a la Municipalidad ante la falta de acuerdo paritario y la prolongación de las negociaciones.
La protesta duró aproximadamente tres horas y exigieron al Ejecutivo que mejore su propuesta salarial, donde el gobierno local no se mueve de una recomposición del 10%, mientras que el STM reclama un 35%.
Además, durante la protesta volvieron a expresar duros cuestionamientos a la postura del Intendente hacia los reclamos de los trabajadores y su intención de declarar «esencial» al trabajador municipal.
MONTENEGRO ANUNCIÓ DESCUENTO DE HORAS NO TRABAJADAS
El intendente Guillermo Montenegro brindó una conferencia de prensa en la sede del COM, un rato después de la protesta de los municipales.
En la ocasión, el jefe comunal adelantó que les descontará las tres horas del salario a los municipales que no estuvieron en sus puestos de trabajo y participaron de la manifestación en las puertas del palacio municipal.
“Es un paro y al que hizo abandono de su puesto de trabajo durante tres horas se les van a descontar», y agregó «así como en su momento se les descontó el día de paro, el que no va a trabajar durante tres horas se le descuenta, como en cualquier trabajo”.
Durante el contacto con la prensa, Montenegro cuestionó duramente el colectivo de trabajo de los municipales que fue registrado la semana pasada por el Ministerio de Trabajo bonaerense y que debe ser convalidado por el Concejo Deliberante.
El nuevo marco laboral se terminó de materializar hace siete años y para el jefe comunal que se haya avalado en medio de un duro conflicto con la cúpula del STM «no fue casualidad» y le apuntó al Gobierno provincial: «El diablo metió la cola».