Por: Roberto Garrone

Si pensamos que Mar del Plata aporta una porción insignificante del volumen de carga removida y de exportaciones que generan todos los puertos bonaerenses, así se desprende del último reporte del Monitor Portuario que elabora la Subsecretaría de Asuntos Portuarios, el aporte que anunció el Gobernador en estos días para realizar obras en la jurisdicción portuaria infieren una señal positiva.

Con datos acumulados hasta el tercer trimestre del 2021 en las terminales administradas bajo la figura de consorcios portuarios se habían movilizado 37,5 millones de toneladas, de las cuales apenas 402 mil los aportó Mar del Plata.

Con la carga de contenedores exportados por puertos bonaerenses la situación no es muy diferente. Entre enero y septiembre del año pasado se habían enviado al exterior 490.231 Teus. El puerto local aportó la significativa cifra de 6861 Teus.

El movimiento de descargas no tiene mucho para crecer salvo alguna temporada excepcional de calamar en el 2020 que para colmo tocó en la unidad de pesca más próxima a Mar del Plata. Nada más cambia la aguja estabilizados el resto de los desembarques. Fueron 347 mil toneladas en el 2019, 395 en el 2020 y 344 mil el año pasado. Lo demás que aporta a la estadística de la carga removida es el combustible del petrolero. Poquito.

Los fondos asignados a Mar del Plata provienen de un fondo especial asignado por la Provincia de 2 mil millones de pesos para ejecutar, ojalá, a lo largo del 2022. En este escenario el puerto local recibió 342 millones de pesos, algo más de lo que le tocaría si se repartiera de acuerdo al aporte que hace cada uno al movimiento general.

Tampoco es que tiraron manteca al techo como para que Fernanda pueda avanzar algunos casilleros y tenga más chances de poder reemplazar a Montenegro el año que viene. Sí, en el 2023 volvemos a votar.

La asignación más importante de fondos desnuda la precariedad con la que se ha venido trabajando casi desde la fundación del propio puerto, hace más de 100 años. Porque casi 250 millones de pesos se destinarán a la adquisición y colocación de defensas.

Serán 169 convencionales que se colocarán en el espigón 1, el muelle 2, el 3 y la Escollera Norte. Las defensas no son más que cubiertas neumáticas, especiales, que sirven para que amortigue los golpes que es común que se generen entre los barcos y el muelle.

Además se comprarán, todavía están terminando los pliegos de la licitación, otras 17 defensas especiales para colocar en las secciones novena y octava del muelle de ultramar, donde amarra el buque de porta contenedores, que por sus dimensiones requiere de elementos de mayor envergadura y por ende, más costosas.

“Nunca hubo defensas de las que vamos a colocar en el espigón 1 y la Norte”, confiaron en el Consorcio. En el muelle Deyacobbi amarra buena parte de la flota fresquera de altura que contribuye a que Mar del Plata sea el principal puerto pesquero del país. Nunca una protección para evitar daños no solo en los barcos sino también en el muelle.

Igual esa zona no es la más crítica. Según los entendidos la más sensible es la Norte, donde eligieron diseñar la Terminal de Cruceros y el sector de amarre de las naves de lujo. Dicen que el rebote de la ola que ingresa al puerto se siente en esa zona de manera más virulenta. Y cuando hay sudestada y mar de fondo, la situación es crítica.

Parte de los 270 metros del muelle reservados para los cruceros están completamente rotos tras sumar temporales con la draga Mendoza amarrada en el lugar. Antes de colocar defensas en esa zona destinarán 22 millones a reparar el muelle que rompió la Draga. A la draga, cuyo casco también se rompió contra el muelle, la llevaron a un lugar más protegido dentro de la Base Naval.

De lo demás nada cambia la ecuación: casi 10 millones para mejorar la iluminación y otro tanto para colocar señalización en las calles interiores como para nadie se pierda cuando quieren ir hacia la Escollera Sur. Cuándo sacarán toda una colección de autos abandonados que ocupan espacios operativos, nadie brindó precisiones.

En la reunión en que el Gobernador y el Intendente recibieron a empresarios vinculados al turismo y la pesca, algunos representantes del sector además de agradecer los fondos anunciados por Axel fueron por más.

“Solicitamos que, siendo un puerto provincial, es necesario que la Provincia realice inversiones en infraestructura en el Puerto Local y que apoye el proyecto de construcción del Espigon 9”, pidió Fernando Rivera en la cuenta de twitter de CaIPA, la cámara que agrupa a empresas procesadoras de la pesca.

Nada dijo el Presidente de la cámara patronal de los barcos abandonados desde hace más de 10 años que tienen empresarios armadores asociados a CaIPA como Moscuzza y Solimeno, en el muelle 2 del puerto de Mar del Plata.

Hoy el puerto de Mar del Plata tiene un tercio de sus muelles ocupados por chatarra flotante. Si a eso le sumamos los barcos en reparaciones debajo de los elevadores y en la Norte, y los tangoneros congeladores que esperan su turno para comenzar a pescar langostino, somos el principal puerto pesquero del país pero también una gran playa de estacionamiento.

Iluminada, pavimentada dragada y hasta con defensas nuevas, pero playa de estacionamiento al fin.


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