Por: Roberto Garrone
Casi al mismo tiempo que en el Consejo Federal Pesquero el pasado 5 de diciembre se aprobaba por unanimidad la asignación por 15 años de la CITC de merluza hubbsi, en la Fiscalía Federal Nº2 del Poder Judicial de Mar del Plata comenzaba a moverse la causa que investiga el pago de coimas por esa cuota.
Incluso desde la semana anterior, fines de noviembre, distintos empresarios y lobbystas de la pesca desfilaron ante el secretario del fiscal Santiago Eyherabide, quien investiga la denuncia presentada por el Gustavo Pulti, ex intendente de General Pueyrredon, hoy diputado provincial y presidente de la Comisión de Intereses Marítimos, por el supuesto pago de 15 millones de dólares en coimas por las cuotas de merluza que tomó estado público en septiembre pasado luego que la maniobra ya acordada se filtrara en LPO y la aprobación quedara en suspenso por 90 días.
Las órdenes de citación cayeron como un balde de agua fría entre los asociados de ADPA, donde a Lisandro Bellarmini se le desmoronó todo el poder que creía haber construido como un castillo de arena cuando avanza la marea.
Este cronista pudo corroborar que declararon Antonio Solimeno, el propio Bellarmini, Daniel Collucio, operador de Solimeno, e incluso Alberto Valastro (toda una rareza porque vendió sus barcos y empresas a Iberconsa).
José Moscuzza posiblemente haya sido citado pero no concurrió y de la empresa española controlada por Platinium Equity, según confiaron fuentes judiciales, se tomó testimonio via zoom a Alberto Freire Plana, alto ejecutivo del grupo Iberconsa.
Juan Pablo Basavilbaso, el CEO en Argentina, no contestó cuando se le coonsultó para confirmar la versión.
Sí se pudo confirmar que además de los funcionarios judiciales de la Fiscalía N°2, también participaron de las audiencias miembros de la Procuraduría de Investigaciones Administrativas (PIA), organismo que se aboca a casos de corrupción en la órbita de la administración pública nacional.
La convocatoria de la Fiscalía a prestar declaración testimonial en la causa que se tramita bajo el juez federal Santiago Inchausti generó un revuelo de proporciones en ADPA. El consejo de un viejo abogado fue “no lleven los celulares”, como para evitar que quedaran secuestrados y a partir de ahí buscar pruebas.
Se desconoce por el momento si Pulti aportará más elementos a la causa, ahora que la asignación de cuotas salió aprobada y es vox pópuli en el sector que Moscuzza e Iberconsa pagaron tal lo revelado en la columna del pasado domingo, la cual generó un templor en cercanías del propio Subsecretario y su mesa chica. Alguno de sus colaboradores más cercanos hasta reconoció que había pensado en dar un paso al costado.
En Fiscalía tratan de determinar por estos días si también pagaron por la merluza negra y por eso se aprobó en septiembre. Cuál fue la ruta del dinero, quién el recaudador. Qué le tocó a cada consejero, cuánto se llevó el Subsecretario. Hasta evalúan volver a citar a alguno de los que ya prestó declaración para una ampliación de la requisitoria.
Mientras impera el secreto de sumario y se avanza en la instrucción preparatoria afloran más y más preguntas. ¿Convocará Eyherabide a Juan Neuss, el nuevo recaudador de la pesca en nombre de Santiago Caputo en la órbita de la Subsecretaría?.
Ahora el negocio en oferta son 10 permisos de pesca de calamar. La noticia no es nueva. Se lo había anticipado López Cazorla a algunos referentes del sector cuando pasó vergüenza en la apertura del congreso de FAO, en Vigo.
Envalentonados con la recompensa por la cuota parecen que han apurado el paso.
A esta altura es imposible que López Cazorla no haya tenido que declarar o tenga que volver a hacerlo. Como el propio Agustín Ocampo, el agente colocador del Subsecretario, los gerentes de las empresas adheridas a ADPA y Dario Baroli, el operador de última hora. Incluso hasta Marcelo González podría contar todo lo que sabe de las negociaciones: la lista de aportantes y cuánto debía aportar cada empresa.
El ex hombre de EstreMar ahora cumple funciones como director financiero en Rich Marine Fishery Group, la empresa china que se quedó con la empresa “Buenavista” dueña del potero “Villarino”. En su cirrículum borró su paso por ADPA. Detalles…
Hablando de poteros… viene a cuento un caso para mostrar lo herido que salió el Subsecretario del proceso de recaudación por la cuota de merluza.
Esta semana en la última reunión del Consejo se aguardaba por una transferencia de un permiso de un barco congelador a un potero para el Grupo Fénix que necesitaba tenerlo antes de fin de año para aprovechar un régimen de promoción chino. Cuentan que el trámite figuró en el borrador pero no en el acta oficial.
También se esperaba que quedara aprobado el permiso del buque “Félix Augusto” como congelador, un viejo anhelo de Conarpesa. Pero ese epediente ni siquiera llegó al borrador del Acta.
Los que abonan la teoría que Solimeno no pagó la coima exponen el enojo de Juan Antonio con Néstor Miguel Bustamante, ex subsecretario de Pesca y el abogado más reconocido en el ambiente pesquero.
Distintas fuentes coinciden en señalar que López Cazorla dio la orden para que no avance ningún trámite de las empresas que lo tengan a Néstor Miguel como representante letrado. El propio protagonista dio su versión de los hechos.
“Una actitud como la que se supone existe, o que habrían adoptado algunos consejeros, no cambiará mi modo de ser y vivir la vida”, aclaró el letrado. “Nunca traicioné mis principios que me llevaron hasta acá, que no son otros que estudiar y confiar en la vigencia de la ley; no del amiguismo, de la conveniencia y otros intereses menos nobles”, remató.
Tal vez el Subsecretario de Pesca identifique a Bustamante como el responsable de convencer a Solimeno para que no abra la billetera como sí hicieron los otros dos grupos concentrados tenedores de cuota, y pague por lo que le correspondía por ley.
El no aporte de Tony podría haber sido la causa por la cual Juan Antonio terminó esa primera semana de diciembre de tan mal humor, estresado y con la presión por las nubes. Sin los 3 millones de dólares que se negó a aportar Solimeno, le habrían picaron el boleto.
Nadie cree en brujas pero parece haberlas en el Consejo Federal. Conarpesa pesca mayormente langostino y Fénix tiene la mayor flota de poteros con los que pesca calamar. Los une una cosa: esta semana sus pedidos no fueron atendidos. A las dos las representa jurídicamente Néstor Miguel Bustamante.
Buen domingo