La relación entre el Sindicato de Trabajadores Municipales y el intendente Guillermo Montenegro entró definitivamente en su etapa de mayor conflicto.
Al paro de 48 horas que el gremio dispuso para este viernes y sábado, en el marco de una negociación paritaria, se sumó la decisión del intendente Guillermo Montenegro de descontar las jornadas no trabajadas al personal que adhiera a la medida de fuerza.
Acompañado por su gabinete, el Intendente brindó una conferencia de prensa en la sede del COM donde comunicó la medida y adelantó que ese dinero que se recaude se destinará al arreglo de calles.
Montenegro calificó de «irracional» la postura del gremio y advirtió que «estos dos días de paro significan que no generan el diálogo necesario y si esta será la forma para trabajar con los sindicatos, no encontrarán en mí ninguna posibilidad».
El Intendente dejó en claro que no firmará un acuerdo salarial que no pueda afrontar «Bajo ningún concepto voy a firmar algo para los empleados municipales que yo no pueda pagar «y que eso signifique aumentar los impuestos a los vecinos. Cuando no alcanza, no alcanza“, sentenció.