Ante la inminente baja a Fase 2 del Partido de General Pueyrredón, desde el gremio que nuclea a los trabajadores gastronómicos y hoteleros de Mar del Plata volvieron a poner el acento en el impacto negativo que tendrá esa medida para el sector.
«No podemos más que, con el 2020 como experiencia, reafirmar que lo que parece un cierre momentáneo es igual a la pérdida de trabajos permanentes», remarcóla secretaria general adjunta, Nancy Todoroff.
«Con cientos de hoteles y decenas de locales gastronómicos que cerraron sus puertas para no poder abrir más, Mar del Plata se enfrenta a una situación irreversible si nuevamente se imposibilita el trabajo en nuestra actividad que, como reiteramos y se ha comprobado, es segura, posee los protocolos correspondientes y si no se cumplen, tanto Uthgra como el gobierno municipal lo han hecho saber con advertencias e inclusive multas por parte de Inspección General a esa minoría que parece no importarle el cuidado de la salud y ni el trabajo de todos a largo plazo», expresó la dirigente mediante un comunicado.
Todoroff manifestó que «no queremos que se convierta en un sálvese quien pueda, no queremos que nuestros restaurante, hoteles y salones de eventos también sigan cerrando y mucho menos, que se siga sin dar respuesta a los cientos de trabajadores eventuales de todos estos establecimientos que no han recibido ayuda alguna del Estado pese a las múltiples presentaciones que nuestro gremio y otros con trabajadores en similares características ha hecho».
En ese sentido, indicó que se necesitan ayudas eficientes y posibles como lo fue el ATP. «El Repro II no está llegando ni va a llegar a muchos trabajadores por sus características. Y así, una vez más, nos veremos condenados a la pérdida de fuentes laborales en una ciudad castigada por la desocupación», enfatizó.
«Pedimos al gobierno nacional y provincial que cuidemos la salud de todos pero también el trabajo y que se generen herramientas para que los marplatenses puedan seguir pensando en un futuro laboral digno, en la posibilidad de seguir llevando un plato de comida a sus familias, de no perder también la salud a costa de la angustia de perder el trabajo», finalizó.