Según el relevamiento mensual que realiza el Instituto de Investigación Social Económica y Política Ciudadana (ISEPCi) en más de 130 comercios de cercanía de los barrios populares del Mar del Plata y Batán, una familia de dos personas adultas y dos niños/as, para adquirir la Canasta Básica de Alimentos (CBA) requirió en octubre de $139.381.
En el período de un año, partiendo desde octubre 2022, la CBA registra una suba del 163,60%.
Por otro lado, el costo de la Canasta Básica Total (CBT) que abarca, además de alimentos, los bienes y servicios necesarios para subsistir, para la misma familia tipo, en octubre 2023 escaló a $301.063.
El director del Isepci en Mar del Plata, Rodrigo Blanco, precisó que «nuestro relevamiento durante el mes de Octubre, realizado en 130 comercios de cercanía de los barrios populares del partido Gral. Pueyrredón, arrojó que una familia tipo constituida por 4 integrantes a nivel local necesitó de $139.381,06 para acceder a la CBA lo cual representa un aumento del 7,75% en comparación al mes de Septiembre de 2023, trazando un aumento acumulado del 144,77% desde Diciembre 2022. Mientras que la variación interanual acumulada partiendo desde Octubre 2022, nos da una suba del 163,60%».
Al desglosar la CBA entre los distintos rubros que la componen, desde el Isepci encontraron que una familia tipo ahora debe destinar $64.520,97 para cubrir los productos del rubro almacén, $27.411,78 para cubrir los del rubro verdulería y $47.448,32 para cubrir los del rubro carnicería, representando una variación mensual del 8,95%, 4,91% y 7,83% respectivamente, comparado con el mes anterior.
«Nuestro informe registró que una familia de dos adultos/as y dos hijos/as que en Octubre de 2022 necesitaba $52.876,43 para cubrir sus alimentos indispensables, un año después precisa $139.381,06 lo que configura un incremento interanual del 163,60%», indicó.
Blanco remarcó que «si comparamos el costo de la CBA con los ingresos, como el Salario Mínimo o la Jubilación mínima, nuestro informe nos permite afirmar que ninguno de los dos por si solo, logra cubrir la canasta en su totalidad. A la vez , si comparamos el porcentaje de variación acumulada del 2023 , el aumento en la CBA fue superior al aumento acumulado de los ingresos mínimos».
Respecto a las medidas compensatorias que ha ido tomando el gobierno, el director del Isepci manifestó que «fueron paliativos importantes para algunos sectores, aunque para otros los alivios siguen siendo relativos».
«Entre los asalariados en blanco que cobran montos medios y altos, la elevación del tope para pagar impuesto a las ganancias –que equivale a su virtual
eliminación- más los aumentos conseguidos en diversas negociaciones paritarias y la devolución del IVA, evitaron que continúe en esa franja de los/las trabajadores/as, el deterioro del poder adquisitivo de sus remuneraciones. No sucede lo mismo entre los/las asalariados que cobran desde el salario promedio, el salario y las jubilaciones mínimas, y sobre todo los/las trabajadores/as no registrados. El bono de $94.000 que
están recibiendo estos últimos, en dos cuotas de $47.000 durante octubre y
noviembre, no alcanza a revertir el enorme retraso que vienen sufriendo sus
remuneraciones en la carrera contra la inflación», detalló.
El próximo gobierno tiene el desafío de consolidar y profundizar desde el inicio un
incremento de los ingresos de los/las trabajadores/as no registrados, con medidas coyunturales urgentes combinadas con otras de mediano y largo plazo, que garanticen su incorporación al mercado laboral registrado bajo remuneraciones que superen el valor de
las Canastas Básicas», finalizó.