Los sindicatos docentes de Mar del Plata manifestaron su profunda preocupación en virtud de las manifestaciones vertidas en los medios por parte de funcionarios municipales acerca del eventual reinicio de clases en esta ciudad por las expectativas que ello genera en la comunidad a la vez que reclamaron el tratamiento minucioso y prudente que debe darse al abordaje de la cuestión y con todos los actores educativos en una mesa de consensos como se está haciendo a nivel nacional y en la provincia de Buenos Aires.
Los secretarios generales de Suteba, Sadop, Udocba y Docentes municipales, coincidieron en señalar que «el retorno a las clases presenciales es sin duda un deseo y una necesidad tanto de alumnos y alumnas como docentes. Nada reemplaza al espacio escolar de aprendizaje, juegos y socialización. Sin embargo, frente la pandemia y habiendo tenido que adaptar la modalidad de enseñanza rápidamente en el marco de esta contingencia, las clases se han seguido dictando gracias a un enorme esfuerzo y trabajo compartido que implica creatividad y colaboración por parte de los maestros, los chicos, chicas y sus familias».
«Compartiendo el criterio de priorizar el cuidado de la salud que ha llevado a suspender la concurrencia a las escuelas, entendemos que el análisis del retorno a las aulas debe ser debidamente analizado, con todos los elementos necesarios para la adopción de la decisión final que está, sin lugar a dudas, en manos de las autoridades provinciales», agregaron.
Los dirigentes gremiales consideraron que algunas de las cuestiones que deberán contemplarse en función de evitar el contagio serán el complejo estado de situación de infraestructura escolar en la totalidad del sistema público educativo de Mar del Plata y Batán, la cantidad de alumnos por curso, la organización de medio de transporte y la disponibilidad de personal docente y auxiliares suficiente para desempeñar la tarea en condiciones seguras quienes a su vez, provistos de los insumos necesarios, deberán ser los aplicadores de los protocolos emanados del último acuerdo paritario firmado por la CTERA, SADOP y otras organizaciones sindicales que contempla los 12 puntos que deben tenerse en cuenta para la seguridad e higiene en el espacio escolar y que son avalados por la OIT y la IE y la IEAL.
«En función de lo que indican los sanitaristas, todavía no hemos atravesado la etapa más crítica de la pandemia. Si tenemos en cuenta además que la provincia de Buenos Aires presenta una gran diversidad y con sectores muy comprometidos con la enfermedad, el regreso será sin lugar a dudas en forma muy gradual, alternando durante un tiempo la presencialidad con la virtualidad, estableciendo prioridades en cada nivel educativo, grupos acotados y alternados, con los protocolos que establezcan las autoridades sanitarias y educativas provinciales y sus referentes locales, a saber Jefatura Regional Provincial, Jefatura Regional DIEGEP y Jefatura Distrital, entre otras cuestiones que deberán definirse», expresaron.
A su vez, sostuvieron que resulta imprescindible garantizar dos derechos elementales: «en primer lugar, el derecho a la salud de alumnos/as, trabajadores/as y de la comunidad marplatense en general, conscientes de que cualquier decisión apresurada puede llevar la aparición de un brote de contagios que ponga en riesgo a mucha cantidad de gente, sobre todo si tenemos en cuenta la gran cantidad de personas en circulación que implica el ir clases en forma presencial».
Finalmente, coincidieron con los dichos del ministro de Educación Nicolás Trotta, en torno a que el regreso se lleve adelante garantizando el derecho a la igualdad de oportunidades de todos los chicos.