La prolongación de temperaturas extremas de calor en Mar del Plata no torció la postura de las autoridades educativas municipales, provinciales y de gestión privada que no suspendieron el dictado de clases.
Tras un domingo con una sensación térmica que superó los 40 grados, Mar del Plata inició la semana con otra jornada de altísimas temperaturas y en las comunidades educativas se volvió muy complejo dictar clases.
Mientras que las autoridades educativas informaron que las clases no se suspendían, en algunos establecimientos educativos fueron los propios directores los que tomaron la decisión de no dictar clases.
En esa línea, el nivel de ausentismo en muchas escuelas fue notoria, ya que los padres entendieron que no se podía exponer a sus hijos a jornadas de extremo calor dentro de aulas donde, a pesar de los esfuerzos y medidas adoptadas, se torna muy dificultoso dar clases.
Ademas, el sistema de atención médica de varias empresas de emergencias médicas debieron acudir a reiterados llamados por alumnos que se descompensaron.
En una recorrida por diferentes establecimientos públicos y privados, sus directores y dueños señalaron que realizaron pedidos ante las autoridades para suspender las clases, pero la respuesta fue negativa, salvo que no estuvieran garantizadas medidas para mitigar el calor.