El intendente Guillermo Montenegro brindó una conferencia de prensa, tras la confirmación por parte de la Provincia que a partir del próximo lunes, Mar del Plata, Batán y Sierra de los Padres pasarán a Fase 2.
En primer lugar, el intendente sostuvo que «siempre fui una persona de diálogo y no voy a dejar de serlo ni de trabajar en conjunto» y volvió a reiterar que desde un principio la prioridad de su gobierno es «salud + trabajo».
Durante su alocución, Montenegro no ocultó su malestar por los cambios de parámetros epidemiológicos que determinan las fases «porque eso perjudica a muchos marplatenses. Cuando se cambian los criterios se confunde a la gente y es muy difícil tener previsibilidad».
A partir de estos cambios, para retornar a Fase 3 el distrito deberá registrar un promedio de 235 contagios diarios durante 14 días, un escenario que el intendente calificó de “complejo”.
Montenegro volvió a remarcar que «la única salida a esta pandemia es la vacunación” y volvió a poner a disposición todos los centros de salud municipales para acelerar los procesosde vacunación.
Respecto a la suspensión de la presencialidad escolar que continuará durante 14 días, el Intendente afirmó que «está demostrado que no es una variación a lo que hace en contagios en nivel inicial y primario. Los chicos tienen que estudiar, los padres tienen que ir a trabajar. Es por toda la comunidad educativa. Desde lo emocional, lo pedagógico y laboral», añadió.
Más adelante, Montenegro señaló que el municipio acatará la resolución provincial, pero dejó en claro que profundizará los controles en la clandestinidad.