Por: Lorena Lastagaray – @rseenaccion
@lasongylagente
Mientras él hacía maravillas en el Hard Rock para convertirnos en Bicampeones de América junto a la Scaloneta, en Mar del Plata, se inmortalizaba su figura y sus hazañas con un mural en la Escollera Norte de la ciudad.
Un domingo espléndido con un clima propicio y una escollera llena de gente disfrutando uno de los sitios más representativos de Mar del Plata, fue el escenario y el ambiente que dieron lugar a la creación del mural de El Dibu.
Emiliano Martínez, un marplatense que triunfa en el mundo y nos representa ante el, hoy ya tiene su mural en la pared más adentrada de la ciudad al Mar Argentino, en el Morro de la Escollera.
La Escollera Norte tiene 1.050 metros de extensión y la parte más cuidada, siempre fue el tramo de la Entrada donde funciona el INIDEP y hay vida comercial hasta el hoy edificio de la PFA que antes iba a ser la Terminal de Cruceros. El resto de la Escollera, lamentablemente nunca lo estuvo.
Allí la gente pasea y es uno de los puntos pesqueros más importantes de la costa marplatense, pero aún así, por problemas de jurisdicción y de no saber muy bien quién tiene incidencia para mejorarla, fue quedando en el olvido, arrumbada y peligrosamente descuidada.
Pero empezó el Mundial de fútbol, nos consagramos Campeones y un Marplatense sobresalió en el 2022.
A raíz de todo esto , comenzó una movida de gestión privada de la mano del “Papá del Dibu” como todos lo nombran allí, desde que se dejó ver en la Escollera, remodelandola, pintando, haciendo reparaciones en las escaleras, arreglando luminarias, engrananzando y poniendo plantas en los canteros.
Junto al Empresario, Cristian Pugliese, algunos contactos del municipio y gente del Club Aldosivi, se dió inicio hace unos meses, la puesta en valor “extraoficial” de la Escollera Norte.
El domingo pasado, uno de los atractivos de Mar del Plata, fue ver cómo los muchachos de Aldosivi, “Hincha de Corazón” y el artista muralista Demian, hicieron posible varios sueños. Tener una escollera transitable y pintoresca, hacer un atractivo turístico más y que los vecinos de la ciudad, puedan disfrutarla, todo el año.
Falta mucho aún para que quede como todos deseamos y siempre nos queda un sabor agridulce porque sabemos que todo esto podrían haberlo hecho desde el Estado, pero es emocionante ver cómo “Cuando se quiere, se puede” y que no importa quién, pero que se concrete en beneficio de todos.
Un verdadero acto de Responsabilidad social.
GRACIAS.