El Banco Central de la República Argentina (BCRA) dio a conocer el último Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM), donde los analistas y economistas destacaron sus proyecciones sobre la economía nacional. Entre los puntos clave del informe, se destacan las expectativas de inflación, el crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI) y el valor del dólar para los próximos meses.
Las proyecciones del REM dejan entrever un escenario de estabilidad económica moderada, aunque con limitaciones. Mientras que la desaceleración de la inflación parece consolidarse en torno al 2,5%, el tipo de cambio nominal y el PBI muestran una tendencia a mantener crecimientos prudentes.
Según los expertos, la inflación continuará su descenso gradual, aunque con ciertas limitaciones. El REM estima que el índice de precios difícilmente baje del 2,5% mensual hasta abril de 2025, un nivel que refleja una desaceleración, aunque todavía distante de la estabilidad esperada por el equipo económico del gobierno.
A corto plazo, los analistas prevén una inflación del 3% para octubre, una mejora en comparación con el 3,4% estimado anteriormente. Este ajuste a la baja podría continuar en noviembre, cuando se espera que la inflación se mantenga por debajo del 3%.
El panorama, sin embargo, podría complicarse en diciembre. Tradicionalmente el último mes del año tiende a ser más inflacionario debido a la demanda estacional, por lo que los especialistas proyectan un índice cercano al 3,2%. Si bien este valor se mantiene por debajo del 3,6% que se preveía anteriormente, la tendencia al alza podría reflejar cierta cautela ante el fin de año.
Qué pasará con el dólar
El REM también arrojó proyecciones clave sobre el tipo de cambio. Los analistas estiman que el dólar cerrará 2024 en torno a los $1021, lo que implica un incremento del 4% en los últimos dos meses del año, alineado con el régimen de devaluación gradual del 2% mensual impulsado por el BCRA.
A mediano plazo, el pronóstico se eleva: para octubre de 2025, se espera que el dólar alcance los $1.245, reflejando un aumento del 26,9% en 12 meses, un ritmo menor que el de la inflación proyectada, lo cual podría implicar una leve apreciación del tipo de cambio real. (Con información de NA)