Un grupo de jovenes marplatenses ideó un original proyecto que tiene como objetivos generar conciencia y acción medioambiental, vincular a las cervecerias con el entorno que las rodean y además busca incrementar las ventas de los locales impactados por la crisis social y económica que generó el Covid-19.
Nicolás Torres, uno de los ideólogos de la campaña, explicó que debido a la cuarentena el unico ingreso de las cerevecerias es por la venta de cerveza artesanal en bolletas PET «las cuales son ideales para la creacion de ladrillos ecológicos. Estos se componen de la combinación de dos tipos de desechos que producimos en el hogar: las botellas PET y los envoltorios plásticos», agregó.
En tal sentido, proponen que cada cliente pueda realizar ladrillos «eco-lógicos» en su hogar, los cuales se rellenan con paquetes de golosinas, galletitas, caramelos, chicles; bolsas de arroz, fideos, cereales, azúcar; tickets, recibos de cajero y boletos de colectivo; papel de aluminio, tapas de yoghurt, envoltorio de manteca; blisters de medicamentos, entre otros desechos cotidianos.
«Por cada ladrillo que se entregue, se recibe un descuento para la póxima compra. Asimismo, los ladrillos se destinarán a obras en el barrio; la cual se definirá cuando tengamos una cantidad necesaria de los mismos. Puede ser alguna parada de colectivo, algún cantero o juego para la plaza, o la colocación de nuevos cestos de basura», explicó Torres.
«Cuanto más ladrillos reunamos mayor será el beneficio para la comunidad y en particular para la zona de la ciudad donde está ubicado el comercio que realiza la campaña», agregó.
El proyecto comenzará está semana en el local gastronómico De Garage ubicado en Constitución 4920.
«A cada ladrillo le pusimos un valor de 40 pesos. Buscamos poder concientizar y unir al barrio con una movida ecológica a través de los ladrillos que serán usados con fines solidarios», manifestaron los organizadores.
«Esperamos poder unir a las personas a nuestro slogan somos amigos, somos emprendedores, somos cerveceros, somos marplatenses, somos de garage», concluyeron.