La fiscal que investiga el crimen del adolescente Luciano Olivera, asesinado de un tiro en el pecho en diciembre de 2021 durante un procedimiento policial en Miramar, imputó a un miembro del Comando de Patrullas de esa localidad balnearia por el presunto encubrimiento del hecho, por el que ya están acusados otros cuatro efectivos, informaron fuentes judiciales.
Ana María Caro, titular de la Unidad Funcional de Instrucción descentralizada miramarense, dispuso la imputación del oficial Alejandro Cepeda, por su presunta colaboración con el principal acusado del asesinato para encubrir el hecho.
Cepeda está acusado del delito de «encubrimiento doblemente agravado», permanece en libertad y será indagado el próximo martes en la sede de Miramar de la fiscalía.
Según indicaron fuentes judiciales, la fiscal entendió que Cepeda ayudó a ocultar el teléfono celular que utilizaba al momento del homicidio el oficial Máximo González (26), acusado de ser quien disparó a Olivera (16) tras una persecución en la madrugada del último 10 de diciembre.
González cumple prisión preventiva en la Unidad Penal 44 de Batán acusado por el delito de «homicidio agravado por ser cometido por un funcionario policial en uso de sus funciones, por alevosía y por el empleo de un arma de fuego».
En el marco de la causa, también se encuentran imputados por «encubrimiento doblemente agravado y falso testimonio» el oficial inspector Nelson Armando Albornoz, y los sargentos Rocío Mastrángelo y Kevin Guerricagoitia, quienes iban en el patrullero junto a González (25) cuando interceptaron a Olivera.
Albornoz también cumple prisión preventiva en Batán, mientras que Mastrángelo y Guerricagoitia fueron excarcelados.
En el marco de la causa, la fiscalía fijó además para el próximo 6 de octubre por la noche la fecha para realizar la reconstrucción del crimen, en la zona céntrica de Miramar.
De acuerdo a la investigación, Olivera fue asesinado tras ser interceptado por un patrullero que se interpuso delante de la moto Yamaha YBR 125 en la que se desplazaba.
El adolescente recibió un disparo en el pecho al llegar al cruce de la avenida 9, entre las calles 32 y 34, cuando el móvil en el que viajaban los primeros cuatro imputados en el caso lo interceptó, y González efectuó un disparo con su arma reglamentaria tras descender del auto, e hirió mortalmente en el pecho de Luciano. (Telam)