El presidente Alberto Fernández calificó al intento de magnicidio que sufrió la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner como «un momento de conmoción para todos», aseguró que lo sucedido «no debe hacer pensar que eso es la Argentina» y reveló que en el marco de la investigación judicial se conocieron conversaciones entre los detenidos que mencionaban al jefe de Estado como el próximo blanco de un posible ataque.
«Se conocieron las conversaciones de los inculpados y hablaban del fallido atentado contra Cristina y hablaban que el próximo soy yo», dijo Alberto Fernández en una entrevista que brindó al canal español Telecinco.
Este mediodía se conoció el adelanto del reportaje que el jefe de Estado concedió al medio español en el que, entre otros temas, se refirió al intento de magnicidio perpetrado el 1 de septiembre contra la Vicepresidenta de la Nación.
Fernández sostuvo que Cristina «está entera» y recordó que en Argentina después de la última dictadura cívico militar «no ha habido crímenes de naturaleza política».
«La imagen es muy dura, porque es la imagen de alguien gatillando dos veces, gracias a Dios sin suerte, a veinte centímetros de la cabeza de Cristina», dijo, pero aclaró que eso no debe hacer pensar que ese acto sintetiza al país.
«No nos debe hacer pensar que eso es la Argentina. Es una banda de sinvergüenzas que son capaces de hacer semejante atrocidad», analizó.
Además, señaló que cuando en el marco de la investigación judicial sobre el ataque contra la titular del Senado se «conocieron las conversaciones de los inculpados» hablaban «del fallido atentado contra Cristina» pero además mencionaban al propio Presidente como posible blanco del próximo ataque.
«Se conocieron las conversaciones de los inculpados y hablaban del fallido atentado contra cristina y hablaban que el próximo soy yo», reveló Alberto Fernández, y aunque consideró que «hay que estar atentos», sostuvo que «no quiere» que por ello «nos separen de la gente».
Respecto del ataque contra la que fuera dos veces presidenta de la Nación, estimó que «en circunstancias como esas» en las que una «multitud» se manifestaba en la calle, «todos los sistemas de seguridad fallan».
«Cuando alguien está dispuesto a poner en riesgo su vida y su libertad, para lograr su objetivo, es muy difícil predecirlo», dijo en referencia a Fernando André Sabag Montiel, la persona acusada de haber intentado asesinar a la Vicepresidenta.
Al respecto, el Presidente reflexionó que «algo no estamos haciendo bien para que en la cabeza de una persona penetre una idea tan horrible, como es la de matar al otro por lo que piensa o representa».
En ese mismo sentido, desestimó que el atacante fuera inimputable: «No tiene ninguna alteración en sus facultades mentales. Tiene plena comprensión de la criminalidad de sus actos. No es un loco. ¿Puede ser una persona enojada con la democracia? no puede reaccionar de este modo», concluyó. (Telam)