En dos meses, y a lo largo de sus 11 presentaciones, el Punto Verde Móvil del Ente Municipal de Servicios Urbanos (EMSUR), ya recibió 799 litros de aceite vegetal usado, 8320 kilos de desechos tecnológicos y 2220 ecobotellas, además de tapitas y otros residuos plásticos, metales, vidrios, papel y cartón. Como retribución por su colaboración con el cuidado del ambiente, y bajo el concepto de Ecocanje, los vecinos se llevaron más de 400 plantines provenientes de los viveros municipales.
De acuerdo al cronograma establecido, los próximos puntos estarán: el 30 de agosto en el Polideportivo Peralta Ramos, Tripulantes del Fournier y Aguada; el 6 de septiembre en la canchita de los Bomberos, frente al Museo MAR; el 13 de septiembre en la plaza Revolución de Mayo, en Libertad y Marconi; el 20 de septiembre en Plaza Italia, 12 de octubre y Don Orione; y el 27 de septiembre en Plaza Güemes, en Roca y Buenos Aires. Todos los viernes en su horario habitual de 10 a 14.
“Estas cifras son realmente alentadoras, es muy importante la cantidad de vecinos que se acercan a los Puntos Verdes todos los viernes porque este éxito nos da la pauta de una gran demanda insatisfecha de tener un lugar donde llevar todos estos elementos. Los efectos positivos del Punto Verde son múltiples, porque no solo todos estos residuos no se disponen en el relleno sanitario, sino que pueden ser recuperados para volver a la cadena productiva, adquiriendo una segunda vida”, expresó Santiago Bonifatti, presidente del EMSUR.
El Punto Verde es “un dispositivo de recepción de aquellos tipos de residuos que los vecinos no saben qué hacer con ellos”, explicó el funcionario y continuó: “En casi todas las casas de la ciudad está claro qué va en la bolsa verde y en la bolsa negra, pero no tanto qué hacer con otro tipo de residuos, por ello, a estos puntos de acopio, los vecinos pueden alcanzar residuos que de otra forma no tendrían un destino sustentable, como ser las ecobotellas, el aceite vegetal usado en envases plásticos y residuos eléctricos y electrónicos como monitores, teclados o celulares en desuso”.
La iniciativa cumple, así, con los tres pilares del desarrollo sostenible por cuanto genera empleo a partir de la revalorización de los residuos, permite recuperar elementos contaminantes y favorece los lazos comunitarios.
Por su parte, Matías Cosso, director de la Unidad de Gestión de Sostenibilidad Ambiental, que impulsa la iniciativa, destacó la respuesta de la comunidad a este dispositivo que “entre sus objetivos tiene la idea de hacer el reciclaje más accesible y conveniente, lo que también nos interpela para estar a la altura de esa demanda y potenciar la recepción y valorización de los residuos”.
Esta propuesta redunda en “múltiples beneficios, ya que no solo disminuimos la contaminación sino que, a través de distintos procesos, estos residuos vuelven al sistema generando valor y empleo, por lo que hablamos de un triple impacto positivo: económico, social y ambiental”, concluyó.
Desde fines de junio, este dispositivo se traslada de forma itinerante, semana a semana a distintas plazas de la ciudad para que toda la comunidad pueda acercarse a hacer su aporte. A cambio por su colaboración y como una forma de retribución, se entregan plantines que son producidos por los viveros que posee el ente municipal.
Hasta el momento, el punto verde móvil ha recorrido las plazas: Pueyrredon, Colón, España, San Martín, Rocha, Mariano Moreno, Plaza del Agua, Parque Primavesi y Peralta Ramos, además de haber tenido presencia en los festejos realizados por el Día de la Niñez en plaza España y en la plaza principal de Sierra de los Padres.
Junto con los puntos fijos que se encuentran en el Palacio Municipal y en el Museo Lorenzo Scaglia, los puntos verdes móviles complementan el trabajo de recuperación que lleva adelante el Municipio a través de la recolección diferenciada y los puntos sustentables, ubicados en barrios periféricos de la ciudad, que permite ahorrar recursos de la naturaleza, extiende la vida útil del relleno sanitario y mejora las condiciones laborales de los recuperadores urbanos.
De esta manera, el Punto Verde promueve la gestión adecuada de residuos, impulsa la economía circular, refuerza la sensibilización y educación ambiental, la participación ciudadana, el empoderamiento y genera un impacto ambiental positivo en la sociedad.