La fiscal Andrea Gómez, quien lleva el caso del joven turista Matías Montín, agredido en la noche del martes en el boliche Ananá de Playa Grande, fue al Hospital Privado de Comunidad (HPC) donde permanece internado y lo entrevistó, oportunidad en la que el joven dijo “no recordar nada de la pelea en la que le pegaron con una botella de champagne en la cabeza”.
El joven de 20 años, que se encuentra por estas horas internado en terapia intermedia, reconstruyó ante la fiscal Gómez los momentos previos a ser golpeado, como en flashes.
La víctima dice que recuerda haber visto a su amigo Santiago en el baño del boliche Ananá con sangre en la cara, por haber sido golpeado por un joven a quien no conocía, y que sería Matías Belloso, el jugador de Arsenal que está imputado en la causa.
Matías Montín le manifestó a la fiscal marplatense que el salió del baño para preguntarle a Belloso por qué le había pegado a su amigo, pero sus recuerdos se interrumpen.
Luego se le vino otra escena a la mente: la de estar sentado, rodeado por sus amigos y con una enfermera del boliche que le pone un paño en la cabeza, al tiempo que recuerda sentirse mojado con su propia sangre y que lo trasladaron al hospital.
En todo momento, Montín le dijo a la fiscal que él no conocía a los agresores y que a Belloso lo identificaba por haberlo visto en los medios.
Terminada la declaración de Montín, sufrió un extraño cosquilleo en uno de sus brazos y quedó bajo monitoreo de los profesionales médicos.
Según se dio a conocer, en los próximos días se espera que la fiscalía tome testimoniales a los amigos de Montín y al personal que trabaja en el reconocido boliche de Playa Grande.
Mientras tanto, Andrés Bracamonte y Gabriel Galvano continuarán detenidos hasta tanto la Justicia de Garantías resuelva el pedido de excarcelación presentado por su abogado, Sergio Fernández. (Télam)