El Gobierno nacional postergó para marzo el aumento del impuesto a los combustibles que incide directamente en el valor de la nafta y el gasoil. Sin embargo, pese a la continuidad del congelamiento de la carga tributaria, las petroleras aplicaron un nuevo aumento en sus productos.
A través del decreto 107/2024, publicado esta madrugada en el Boletín Oficial, se establecieron los incrementos en los montos de los impuestos fijados para los combustibles, correspondientes al primer, segundo, tercer y cuarto trimestres del año 2023, debido a que habían quedado desactualizados.
De esta manera, el Gobierno fijó que el aumento del primer y segundo trimestre de 2023 tenga efecto para la nafta sin plomo, la nafta virgen y el gasoil a partir del 1° de marzo de este año. Mientras tanto, los demás incrementos están previstos para el 1° de abril y el 1° de mayo.
Pese a esta normativa, a primera hora del jueves los valores de los combustibles reflejaban modificaciones respecto de los de la víspera, en mayor o menor medida. Mientras que YPF aplicó una suba de cerca del 6,5 %, en Puma la variación fue significativamente menor y en Shell, un poco mayor.
Fuente: La Nueva