Las entidades del sector privado productivo solicitaron al unísono ante sus representantes municipales, provinciales y nacionales medidas acordes a la situación económica catastrófica que afrontan.
Avedis Sahakian, presidente de la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica de Mar del Plata encabezó el discurso en conferencia de prensa y aseguró que «la situación puede tornarse irreversible» y recordó que » sin trabajo, no hay futuro, que sin empresas no hay empleo, y sin producción no hay un sistema de salud sostenible».
Los empresarios instaron a pensar otros caminos: baja de impuestos para reducir la evasión y hacer crecer el número de contribuyentes, apoyo a las PyMEs, apertura del país a inversiones, aseguramiento de los servicios esenciales, como la salud y la seguridad y por sobre todo, el fortalecimiento de la justicia como vía privilegiada para poder pensar en un país que pueda tener futuro.
El sector productivo de Mar del Plata necesita certidumbre para poder tomar decisiones, conocer qué es lo que están analizando nuestros representantes, cuáles son los escenarios posibles para los próximos meses y, en consecuencia, contar con planes alternativos para poder saber cómo acomodar sus empresas y resolver si es posible o no sobrevivir a esta paralización, que se prolonga al tiempo en que se resuelven las soluciones sanitarias.
La incertidumbre es fuente de costos y el más preocupante es aquel costo económico, social e incluso político que va asociado a la irreversibilidad. Cada empresa que cierra implica puestos de trabajo que se pierden, achicamiento del mercado, empobrecimiento general del proyecto de ciudad.
Mar del Plata aporta diez veces más de lo que recibe al Producto Bruto de la provincia de Buenos Aires. Todos sabemos que un año sin temporada será devastador para la ciudad. Éste es el momento trascendente para adoptar las decisiones políticas que se necesitan.
Avedis Sahakian indicó que «no se trata de la disyuntiva turismo vs. salud; se trata de apoyar la producción y el trabajo como sostenes del propio sistema sanitario, para que, aportando los recursos necesarios, podamos seguir cuidándonos»
El presidente de la AEHG continuó «el sector productivo está protocolizado y preparado para cumplir adecuadamente con las medidas de prevención, pero la suerte está echada. O abrimos para trabajar con los cuidados necesarios, como ya hemos demostrado saber funcionar (con la ayuda fiscal y financiera que Estado pueda brindarnos, reducción del IVA, tasa “cero” en créditos, entre otras) o cerramos nuestras empresas para recibir un salvataje económico que impida nuestra extinción. No avizoramos otras salidas. Hace años que la enorme presión fiscal viene asfixiando nuestras empresas, sin dar evidencia de solución de los problemas más acuciantes de nuestro país, tales como la pobreza, el desempleo, la seguridad o la propia salud.»