Lo que pudo haber sido una excelente actuación del marplatense Marcos Siebert terminó con la frustración de una rotura del Mercedes Benz del equipo Mercedes AMG Motopark, que relegó las expectativas del binomio donde el argentino aspiraba a vencer en la carrera.
Siebert largó en la primera fila luego de conseguir el mejor tiempo de la clasificación del día, y tras mantener el tercer puesto que le daría luego el triunfo por reglamentación de la categoría, entregó el auto al mexicano Diego Menchaca en la posición de podio.
Pero la mecánica le jugó una mala pasada al mexicano, cuando estaba al comando del Mercedes: una rotura en la suspensión dejó afuera de la competencia al auto y de esa manera se esfumaron las chances de obtener el triunfo y pelear el campeonato.
Siebert había realizado una excelente actuación. Los punteros tenían recargo reglamentario y eso hacía que el tercer puesto que Marcos cuidaba para no esforzar el Mercedes, le diera el triunfo. Pero fue la pieza de la suspensión la que se encargó de hacer abandonar al auto.
Por delante quedan cuatro competencias para la GT Open Internacional, en un contexto complejo para los Mercedes que no parecen tener el mejor rendimiento, en comparación con el resto de las marcas y los resultados del año anterior.
No obstante, Siebert destaca como el mejor piloto de la marca con las prestaciones del equipo Motopark y llevando adelante importantes actuaciones.