La industria pesquera dio a conocer un comunicado donde expresó que el sector atraviesa “una situación muy delicada como producto de la pérdida de rentabilidad y competitividad de sus principales explotaciones” y advirtió por la pérdida de rentabilidad y competitividad en medio de un contexto adverso internacional.

Las principales entidades del sector pesquero en la Argentina hicieron hincapié en “la declaración de emergencia pesquera por la que están atravesando distintas provincias cuyas realidades económicas y sociales se ven dañadas producto de la falta de rentabilidad que viene enfrentando el sector”.

“Afortunadamente la buena salud del caladero permitió que el negocio siguiera funcionando, con la esperanza que el cambio político trajera un alivio para los sectores productivos y exportadores», indicaron.

La industria pesquera reconoció los esfuerzos que está haciendo el gobierno nacional para contener el superávit fiscal, abrir y desregular la economía. «Sin embargo, no podemos dejar de mencionar que en un contexto donde seguimos arrastrando niveles de inflación todavía elevados y se siguen ajustando los precios relativos de salarios, servicios e insumos, el ancla cambiaria ha erosionado nuestra rentabilidad hasta niveles que ya son insostenibles”, aclararon.

No obstante, se indicó que “a diferencia de otros sectores exportadores, la industria pesquera no puede especular demorando exportaciones hasta que los precios internacionales o el tipo de cambio real mejoren ya que se trata de una actividad exportadora de productos congelados de limitadísima posibilidad de mantener stocks a la espera de que disminuya el costo argentino”.

“En los últimos 4 años todos nuestros costos han aumentado por encima del aumento del dólar oficial” y ponen de relieve la baja del precio de la merluza –por la devaluación de Brasil- y el langostino, además del incremento de los salarios y el aumento del combustible “que pasó de un costo de 0,91 dólares el litro a 1,21 por litro”, continuaron.

En otro tramo del comunicado detallaron la “situación insostenible” para las empresas, “con precios de que en lo que va del año han pasado de U$S 3.750 a U$S 3.000 (caída del 20%) y a Europa de U$S 3.600 a U$S 3.200 (caída del 11,1%) y costos como el de energía que subió en este mismo periodo aproximadamente un 300%”.

Las cámaras también enfatizaron que “el escenario para la pesca costera es peor aún, con la retracción de la demanda de la industria precios a la baja para las exportaciones de corvina y pescadilla que van a mercados africanos o asiáticos. Y un mercado interno que no repunta para el resto del variado costero”.

Finalmente, explicaron que “las crisis en las economías regionales impactan fuertemente en las ciudades y en su gente. La industria pesquera significa mucho para Mar del Plata, ya que se encuentra fuertemente relacionada con otras actividades económicas. Constituye uno de los sectores que mayor valor agregado incorporan a su economía y genera más 37.000 puestos de trabajo directos, que alimentan y dan resguardo a la comunidad. Las pérdidas se pueden disimular disminuyendo stocks, consumiendo el capital de trabajo, comenzando procesos de endeudamiento o liquidando ahorros, pero cuando el flujo es negativo o tarde o temprano derivará en una grave crisis».


Ultimas noticias

Something went wrong. Please refresh the page and/or try again.

Deja un comentario

Deja tu comentario