El diputado provincial Gustavo Pulti presentó un proyecto en la Cámara de Diputados provincial, para repudiar la decisión británica unilateral e inconsulta de avanzar en el proceso de exploración y explotación offshore de petróleo en aguas del atlántico sur y denunciar la inacción inexplicable del Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto.
«De febrero a julio se anunciaron la restricción marítima de 166.000 kilómetros, luego la construcción de un Puerto en Malvinas que apunta la soberanía en Antártida y, ahora, la exploración offshore. En cinco meses tres decisiones avasallando la soberanía argentina», señaló Pulti.
El diputado provincial recordó que “es un proceder ilegítimo que se remonta al año 2010, cuando la ocupación británica abrió un proceso de licitación para la búsqueda de hidrocarburos en los mares circundantes a las Islas Malvinas. El yacimiento en cuestión se calificó como de clase mundial, con reservas comprobables de 580 millones de barriles de petróleo”.
En esa linea, Pulti agregó que “esto llevó a que las autoridades de la compañía que ganó la licitación declarara que el hallazgo podía transformar el esquema productivo de las islas, elevándola a la de nueva provincia productora de hidrocarburos”.
El Consejo Consultivo de las Islas Malvinas lanzó en fecha reciente una consulta pública a llevarse a cabo desde el lunes 24 de junio hasta el 5 de agosto referida a la “Declaración de Impacto Medioambiental EIS” del yacimiento de petróleo identificado como Sea Lion (León Marino) ubicado en el Área de Desarrollo del norte de las Islas Malvinas, con la decisión de llevar adelante tareas de explotación de recursos naturales no renovables sujetos a la disputa de soberanía.
Pulti remarcó que “el yacimiento Sea Lion se encuentra a 300kilómetros al norte de las Islas Malvinas, e involucra la perforación de 23 pocos petroleros y la producción de más de 300 millones de barriles de petróleo durante 30 años” y finalizó “el silencio y la inacción de la Cancillería viola las leyes y la constitución nacional. No podemos permitir que el gobierno británico continúe explotando los recursos de las Islas Malvinas y mares circundantes, que constituyen territorios soberanos argentinos”.