El base Matías Ibarra, campeón con Peñarol en la Liga Nacional de Básquet, será parte de las selección italiana +40 que disputará el Mundial de Maxibásquet en «La Feliz» entre el 26 de agosto y el 3 de septiembre.
El multitudinario torneo convoca a jugadores desde la categoría +30 hasta +80 con unos 280 equipos participantes de más de 30 países.
A los 42 años, el cordobés que vistió la camiseta de Quilmes cuando era juvenil y que salió campeón con Peñarol muchos años después, fue elegido para integrar el representativo de Italia, donde está viviendo actualmente junto a su familia.
Se trata de un jugador muy querido en los dos clubes de la ciudad que aceptó con sorpresa y alegría la propuesta de sumarse al equipo «azzurro» de mayores de 40 para seguir despuntando el vicio tras haberse retirado en Oderzo Basket de la Serie C de Italia hace dos años.
«Estoy en actividad pero no profesional. Pensé que el básquet era un capítulo cerrado. Apareció esta oportunidad y es una alegría volver a Mar del Plata», contó Ibarra desde Italia.
«No me lo esperaba. Había estado en Argentina para las Fiestas. Estaba parado. No quería saber nada con el básquet. Pero volví acá en un torneo amateur para jugar en la semana sin compromiso. Jugué un partido y me llamó el entrenador de la selección. Pensé que era una broma de un amigo. Me preguntó si estaba dispuesto a renunciar al verano europeo para ir al invierno sudamericano a jugar un Mundial. Seguía pensando que era una broma. Cuando me dijo que se jugaba en Mar del Plata, te podés imaginar. Hace más de 9 años que no voy. Me puse a buscar en internet, Italia se toma estos torneos de manera muy seria y me sumé. No deja de ser un Mundial», reconoció con entusiasmo.
A la espera de volver a competir en Mar del Plata pero esta vez con la camiseta de Italia, el «Lata» Ibarra admitió que «la ciudad es muy especial para la familia por los buenos momentos que pasamos en Quilmes y el recuerdo de haber sido campeón con Peñarol, además de tener tantos amigos».
Y adelantó que Italia quiere hacer mucho ruido en el Mundial: «Me encontré con un trabajo muy serio. Hay muchos sponsors. Tenemos la presión de lograr resultados», comentó. Pero admitió que «en el básquet de veteranos también se valoran otras cosas como juntarse a comer y disfrutar. A esta edad no hay otros intereses más que seguir con esta pasión. No veo la hora de estar allá».