El ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollan, manifestó que siguen muy de cerca a Mar Del Plata, que desde el pasado sábado debió retroceder de Fase por la cantidad de contagios, y reconoció que lo sucedido era una lógica esperable.
«Por las irresponsabilidades empieza a instalarse la circulacion comunitaria en todos lados, se vuelve muy difícil apagar estos focos y entonces se empieza a correr de atrás», sostuvo Gollan en diálogo con LU6 AM760.
Tras señalar el aumento de ocupación de camas en el sistema de Salud público y privado,el ministro resaltó la tarea que vienen afrontando los trabajadores. «La verdad es que no pueden parar de trabajar y eso conlleva un alto nivel de estrés. Estamos apoyándolos psicológicamente pero es terrible lo que están viviendo», agregó.
En ese sentido, Gollan confesó que «el principal escollo que tenemos es el personal no son las camas. Las camas se compran. Lo que no podemos es estirar el recurso humano. En Argentina tenemos 1900 especialistas médicos en terapia intensiva y no hay más».
Gollan sostuvo que cuando se va adelante del virus los testeos sirven, «pero cuando la circulación empieza a ser masiva se pierde el dato de donde viene el contagio y se ingresa en una etapa de mitigar e intentar que no crezca tan rápido».
Tras plantear que es la situación en la que se encuentra Mar del Plata, el ministro de Salud manifestó que»todavía no está perdida la batalla de poder suprimirlo en Mar del Plata y por eso se ha bajado de fase. Si hacemos un esfuerzo ahora podemos llegar a bajar la circulación y volver a abrir algunas actividades. Sino tendríamos que bajar aún más de fase».
«Imagínense ustedes que la situación se desmadre, no estamos tan lejos, y empecemos a ver en Mar Del Plata lo que hemos visto en otros países del mundo es un dilema donde tratamos de hacer el menor daño posible a los sectores económicos, pero resulta muy complicado», comentó.
Finalmente, Gollan dejó un mensaje a la población: «si nos cuidamos mucho por ahí en pocos días podemos abrir más actividades económicas, pero si seguimos como que no pasa nada vamos a tener que tomar medidas más duras y no queremos eso. Queremos ver una Mar del Plata resplandeciente».