«Una vida normal, sin limitaciones en viajar, podés tomar alcohol donde venden alcohol, ir a bailar. No hay diferencias en eso, pero la seguridad de vivir acá no se compara con nada”. Belén Hermina aún no llega a los 30 y hace 5 años que vive y trabaja en Qatar, epicentro del próximo Mundial de Fútbol 2022 que ya ha revolucionado Medio Oriente y el mundo.
Entre mitos y verdades fue desarrollando su vida personal y profesional en un país muy distinto a Argentina, en una ciudad muy diferente a su Olavarría natal y que hoy está en la mira del mundo occidental, sobre todo por la figura de la mujer y las minorías.
Sin embargo, Belén cuenta que “en nuestro país si te da miedo salir a caminar en algunos horarios, o guardar el auto a la noche, etc. Acá podés salir a caminar a las 3 am con el teléfono en la mano que nadie te va a hacer ni decir nada: ni un piropo, ni algo malo, ni acercarse ni nada. Se ve mucho el respeto, sea el barrio que sea. Y la policía no anda por las calles, no los ves”.
Hermina, quien este viernes 10 de junio a las 18 realizará un vivo de instagram para despejar dudas a todos los que quieran ir a trabajar o viajar a Emiratos (intagram live @phrshospotalityexperts), llegó acompañando a su novio, entrenador de voley y primero trabajó en una Embajada y luego se dedicó a la hospitalidad y junto a su socio Carlos Díaz pusieron en marcha la consultora PHRS, con la cual reclutan trabajadores de todo el mundo para trabajar en grandes cadenas hoteleras y gastronómicas: “Son muchas cadenas internacionales las que hay, está muy occidentalizado el sistema con hoteles acá y tienen personal de hasta 90 nacionalidades, sobre todo los vinculados al lujo 5 estrellas”, detalla.
En este sentido y ante las informaciones que llegan desde Medio Oriente, también aclara que “no importa la elección sexual para venir a trabajar o aplicar. Nadie es atacado ni tiene una vida anormal. Ni heterosexuales ni homosexuales podemos tener demostraciones de afecto en la vía pública, estar a los besos. Ojo, no te van a poner una multa porque te des un beso con tu pareja, solo alguien si se siente ofendido te puede decir algo pero tampoco de mal modo. Tiene que ver con sus tradiciones, no con la elección sexual de los occidentales”.
Otro de los tabú que considera hay que desmitificar es el que rodea a la vestimenta, sobre todo femenina: “Yo voy a trabajar con una musculosa de tiras, común. La regla general es cubrirse hombros y rodillas, para los hombres y mujeres pero está muy occidentalizado todo por lo que sólo si vas hacer un trámite a clínicas, bancos o lugares estatales te pueden pedir que te cubras, pero no retándote ni de mala forma, solo piden respetar esa costumbre propia, que es más por respeto. Los que son locales, el cuerpo es para la intimidad y deciden dejarlo para su casa, su familia. Como ellos se cubren y que otros no los vean, a veces pretenden lo mismo del resto pero hoy podes ir a correr, a un parque, a un bar, a comer, no pasa nada”.
Medio Oriente “está en expansión, atrayendo turismo y por eso van abriéndose”, de hecho de cara al mundial “dicen que no van a dejar de lado sus costumbres, pero también entienden que hay gente que tiene otras y mientras no ofenda a nadie o sea un delito, no tienen problemas. No es tan extremo como se dice. Inclusive las costumbres en las nuevas generaciones de mujeres locales han cambiado: el divorcio es aceptado, los cambios son constantes”.
Hoy Belén encabeza desde PHRS búsquedas que apuntan a las aperturas de los nuevos gigantes de Jumeirah y Waldorf Astoria en Dubái y Qatar, con oportunidades laborales con todos los gastos pagos más salario.