El juicio por jurados a tres jóvenes acusados de haber abusado sexualmente de una adolescente de 14 años en un camping de la localidad balnearia de Miramar comenzó en el Teatro Auditorium de la ciudad de Mar del Plata, y contó con la conformación del tribunal popular y las declaraciones testimoniales de los padres de la víctima, informaron fuentes judiciales.
El padre y la madre de la víctima brindaron detalles del hecho denunciado el 1 de enero de 2019, en el cierre de la primera de las cuatro jornadas que tendrá el debate.
El juicio comenzó con algunas horas de demora, luego de que la defensa de uno de los tres imputados pidiera la recusación de uno de los fiscales intervinientes, planteo que fue rechazado por el juez Fabián Riquert, presidente del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 3 marplatense.
Según explicó el abogado de la adolescente y su familia, Maximiliano Orsini, hubo «una incidencia de recusación por parte de una de las defensas» hacia el fiscal Guillermo Nicora, quien interviene en el juicio junto a la fiscal Ana María Caro.
El letrado precisó que el planteo «estuvo fundado respecto de un tema probatorio», luego de que uno de los defensores expresara que se había sentido agraviado por un pedido del fiscal para que no se expusieran cuestiones personales de la víctima que no tuvieran que ver con el hecho que se juzga.
Tras ese retraso, se realizó la audiencia de selección de los doce jurados titulares y los seis suplentes que conforman el tribunal ciudadano, que deberá definir si Tomás Jaime (26), Lucas Pitman (24) y Juan Cruz Villalba (25) son responsables del delito de «abuso sexual con acceso carnal agravado por la participación de dos o más personas».
Los jóvenes están acusados de haber violado en la madrugada del 1 de enero de 2019 a la adolescente en una carpa del camping «El Durazno», ubicado en el ingreso a Miramar, donde ella festejaba Año Nuevo con su familia.
Conformado el jurado, se realizó un cuarto intermedio hasta las 15, cuando se inició la audiencia del debate, con la recepción de juramento a los miembros del tribunal popular, y explicación de las instrucciones iniciales.
Luego presentaron sus alegatos la fiscalía y el abogado de la adolescente, quienes insistieron en la acusación por abuso sexual.
A continuación, los tres defensores particulares de los imputados -Noelia Agüero, en el caso de Pitman; Martín Bernat y Agustín Robbio en el de Jaime, y Marcelo Jiménez por parte de Villalba-, aseguraron que pedirán la absolución de los jóvenes.
Agüero planteó a su vez que se trató de acto consentido, mientras que los defensores de los otros dos acusados consideraron que la participación de ambos no está probada.
En el cierre de la primera jornada, los padres de la menor brindaron su testimonio como particulares damnificados, y luego se pasó a un cuarto intermedio.
Fuentes judiciales indicaron que las audiencias se retomarán mañana a partir de las 9, con las declaraciones de cuatro testigos durante la mañana y otros cinco por la tarde.
El juicio se desarrolla en las instalaciones del complejo teatral ubicado en La Rambla marplatense, para garantizar el cumplimento de los protocolos sanitarios en el marco de la pandemia de coronavirus, y está previsto que el próximo viernes 17 se conozca el veredicto.
El TOC 3 dispuso que la prensa no tenga acceso a las audiencias para preservar a la víctima, que aún es menor de edad, así como a su familia.
En ese sentido, Nicora lamentó la decisión del tribunal ya que «la propia familia quisiera ventilar esto públicamente».
«No podremos dar ninguna información oficial hasta que el juicio termine y el jurado dicte su veredicto», expresó.
De acuerdo a la investigación, que estuvo a cargo de la fiscal Florencia Salas, los imputados abusaron sexualmente de la adolescente entre las 4 y las 6 del 1 de enero, «aprovechándose de la edad» de ella y de que «no podía consentir libremente el accionar».
Los acusados fueron detenidos tras una denuncia radicada por la menor, junto a su madre, en la Comisaría de la Mujer de Miramar, y estuvieron alojados en la Unidad Penal 44 de Batán hasta el 3 de mayo de 2019, cuando se les otorgó el beneficio del arresto domiciliario con monitoreo electrónico.
Esa morigeración quedó sin efecto días atrás, a partir de un pedido de la familia de la adolescente, que solicitó que fueran excarcelados para evitar que siguieran computando tiempo como parte de una eventual sentencia.
Los acusados negaron al momento de sus indagatorias que hubiera existido un abuso sexual. (Telam)