El jefe de Gabinete de la provincia de Buenos Aires, Carlos Bianco, afirmó que se «está trabajando en el armado de los protocolos» junto a los intendentes para habilitar fiestas de hasta 200 personas para «desalentar» las celebraciones clandestinas, y aseguró que uno de los requerimientos que habrá que cumplir será el de pedir autorización.
En declaraciones periodísticas, el funcionario bonaerense manifestó que “todo tiene que ser con cuidado; se está trabajando en los protocolos» y agregó que las fiestas «deberán ser al aire libre y la autorización deberá gestionarse ante cada municipio”.
También remarcó que todo tiene que estar contemplado dentro de la etapa de distanciamiento por la que atraviesa la provincia.
Bianco mantuvo una videoconferencia con los 135 intendentes bonaerenses y en los puntos que hay acuerdo es que las fiestas no deberán superar las 200 personas, realizarse lugares cerrados al aire libre.
Además, aclaró que no se podrá superar el 30 por ciento de la capacidad de cada lugar.
Asimismo, se remarcó que todavía no hay una fecha establecida para este tipo de habilitaciones porque se vienen las fiestas de fin de año, donde las reuniones ya serán más amplias.
El funcionario reconoció que “queremos desalentar las fiestas clandestinas, porque el Estado no puede controlar y en ese sentido hay que ser muy riguroso”, al tiempo que admitió que “hay que tener mucho cuidado en los espacios públicos, estamos con muchos controles porque no debemos relajarnos”.
Por último el funcionario provincial destacó: “Nos preocupa y por eso estamos muy atentos a las fiestas clandestinas, porque no sabemos la cantidad de gente que participa, si se respetan los cuidados y que es lo que consumen”. (Télam)