El precio de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) aumentó 2,6% en agosto, con lo que un grupo familiar integrado por una pareja con dos hijos necesitó contar con ingresos de al menos $18.792,42 para no caer en la indigencia, informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) .
El Indec informó también que el costo de la Canasta Básica Total (CBT), que además de alimentos mide a otros rubros como indumentaria y transporte, se incrementó 2,1% en agosto, por lo cual el mismo grupo familiar necesitó contar con ingresos por $ 45.477,66 para no caer debajo de la línea de la pobreza.
De esta forma, en los primeros ocho meses del año la Canasta Básica Total aumentó 16,7% y la Alimentaria, 20,6%.
La diferencia entre una y otra se debe esencialmente a la evolución del ítem tarifas de los servicios públicos y transporte, que se encuentran congelados.
Esta diferencia también se refleja en la medición de los últimos doce meses, cuando el costo de la Canasta Básica Alimentaria avanzó 41,7%, mientras que la Canasta Básica Total subió 37,84%.
Pobreza e Indigencia
El Indec tiene previsto dar a conocer el 30 de septiembre próximo la variación del Índice de Pobreza y de Indigencia durante el primer semestre del año, período en el que la actividad económica cayó 12,9% y se produjo un incremento en el desempleo, en el marco de las medidas de aislamiento sanitario dispuestas para morigerar el avance del coronavirus el 20 de marzo pasado.
Estos índices se construyen a partir de la relación que existe entre los ingresos que obtienen los asalariados para hacer frente al costo de la Canasta Básica Alimentaria, que marca el umbral por debajo del cual se cae en la indigencia, y la Canasta Básica Total, que es el límite empleado para medir la pobreza.
El índice de Salarios del Indec registró durante el primer semestre del año un incremento del 15,8% en los ingresos de los trabajadores privados, del 12,2% en los empleados públicos, y del 13,1% en los “no registrados”, por debajo del incremento de 20,6% de la canasta alimentaria y del 16,7% de la canasta total en el mismo período.
La última medición del Indec, dada a conocer en marzo sobre datos del segundo semestre del 2019, registró que el 35,5% de los habitantes estaban por debajo de la línea de la pobreza, lo que representó un aumento de tres puntos y medio frente al 32% de finales del 2018.
En tanto, el nivel de indigencia medido entre julio y diciembre del año pasado fue de 8%, con un incremento de 1,3 puntos en relación al 6,7% del segundo semestre de 2018.
De esta manera, sobre una población de 47 millones de habitantes, alrededor de 16,4 millones de personas no tuvieron los ingresos suficientes para adquirir la alimentación, servicios básicos e indumentaria, que se requieren para no ubicarse por debajo de la línea de pobreza, entre los cuales, 3,7 millones no tenían dinero ni siquiera para alimentarse todos los días. (Télam)