Las centrales obreras de General Pueyrredón, expresaron su preocupación por el escenario que presenta la ciudad ante el notorio incremento de casos de coronavirus.

Mediante un comunicado, la CGT y las dos CTA (Autónoma y de los Trabajadores) coincidieron en remarcar la profunda preocupación, «no solo por la falta de camas para dar respuestas inmediatas ante el aumento considerable de casos nuevos; sino también el desgaste físico y emocional que atraviesan las y los trabajadores de salud».

«Trabajadores que se encuentran al límite de las fuerzas y con guardias agotadoras y sin francos desde el inicio de la pandemia. Sufriendo precarización laboral y su correlato salarial», manifestaron los referentes sindicales.

Además, enfatizaron que los trabajadores del sector demuestran «un alto compromiso profesional y vocacional que se ven obligados a tener más de un
empleo en el sector para poder cubrir la canasta familiar».

Las centrales obreras no ocultaron su preocupación por lo que entienden como «la inacción por parte del municipio y de su Secretaría de Salud. Dia tras días,
vemos un aumento exponencial de contagios, y la falta de respuesta ante la necesidad de realizar hisopados
masivos».

A su vez, cuestionaron la postura del intendente Guillermo Montenegro de habilitar rubros a pesar del aumento de casos. «La circulación comunitaria estaba entre nosotros, mientras el intendente avanzaba con las
aperturas indiscriminadas. Somos conscientes del esfuerzo que desde la Provincia y de Nación llevan
adelante para ampliar la atención frente al COVID-19. Pero no lo vemos reflejado desde la Municipalidad», agregaron.

«No han destinado una sola cama de internación frente a la pandemia. Empresas pesqueras donaron el valor
de 10 mil testeos, que llamativamente fueron volcados a un solo laboratorio privado teniendo en nuestra
ciudad el INE para llevar a cabo esa labor. Testeos que no se volcaron en su momento para lograr una detección en distintos barrios donde la circulación del virus en forma comunitaria chocaba con las
declaraciones de funcionarios municipales negando la realidad», criticaron.

Más adelante, reclamaron que el municipio
implemente el VED-COVID. «Un Software original desarrollado por un grupo del INE en conjunto con un
desarrollador de la Facultad de Ingeniería de la UNMDP, que funciona exitosamente en más de 14 municipios
para el seguimiento de contactos», explicaron

«También es preocupante y repudiable las actitudes de la municipalidad que en medio de la crisis sanitaria, intentó sin éxito (producto del rechazo colectivo de CICOP con el acompañamiento de las 3 centrales obreras) reducir horas de atención pediátrica en los CAPS (Centros de Atención Primaria de Salud). No solo eso, sino también, deliberadamente cerraron dos de los tres paradores que daban asistencia y contención a personas en situación de calle. Tanto el que funcionaba en el Hotel de Chapadmalal como así también el que funcionaba en el barrio Las Américas, fueron cerrados, dejando sin ninguna protección en el peor momento sanitario a quienes allí se albergaban», añadieron.

Ante este diagnóstico poco alentador, desde las centrales sindicales «creemos necesario y urgente que el municipio revea el abordaje integral que se desarrolla para contener a la pandemia. Se debe dar un giro de
180 grados al modo y métodos de intervención que se lleva adelante».

«Exigimos al municipio que verifique
que aquellas actividades que están funcionando, sean las estrictamente autorizadas, habiendo tomado
conocimiento de empresas que obligan a trabajar presencialmente a su personal en casos que debiera
hacerse la tarea en forma remota. Asimismo, es necesario que las autoridades municipales se ocupen y
preocupen del control y cumplimiento de los protocolos en defensa de la salud de trabajadores y trabajadoras de actividades autorizadas», finalizaron.


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