El surfista marplatense Santiago Muñiz se prepara en Brasil para el Mundial que se postergó para mayo próximo y repartirá cinco plazas para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, reprogramados para julio de 2021 por la pandemia de coronavirus.
Muñiz, de 27 años y dos veces campeón del Mundial ISA (2011 y 2018), está llevando a cabo un entrenamiento físico más duro y probando tablas, ya que las competencias de surf están canceladas hasta el año que viene por el coronavirus.
«Mi ilusión está puesta en El Salvador, en el Mundial ISA que otorgará cinco plazas para Tokio. Mi gran objetivo siguen siendo los Juegos Olímpicos, luego de haber estado cerca en los Panamericanos del año pasado”, explicó Muñiz, rider estrella de Quiksilver Argentina y representante del club San Lorenzo, en declaraciones de prensa.
Muñiz nació en Mar del Plata pero vive en Bombinhas, Brasil, donde su familia se radicó hace tres décadas. «No considero que el 2020 sea un año perdido. Es diferente. Esta pandemia nos obligó a una nueva manera de vivir que nos tiene que servir para crecer en otras áreas. Estoy buscando volver más fuerte y mejor», contó el surfista.
Con respecto a la situación en la ciudad donde vive en el estado de Santa Catarina, Muñiz admitió que es difícil: «Comparado con Argentina en Brasil hubo muchas menos restricciones sociales pero, también, miles de muertes más. Lo de Argentina fue un ejemplo total, se lo tomaron en serio».
«Acá resultó muy distinto. Desde el presidente hasta la gente. Salvo un mes, cuando cerró todo, el resto del tiempo se hizo casi vida normal, con medidas de seguridad pero sin el aislamiento obligatorio. Hoy tenemos más de 1.000 muertos por día y es uno de los países con más contagios».
Santiago fue dos veces campeón del Mundial ISA (2011 y 2018) y el argentino de mejor ubicación en el ranking mundial QS entre 2012 y 2018 (46° en 2016), pero también estuvo parado durante seis meses en 2018 por una lesión y otros seis en 2019 por un pico de estrés.
«Solamente un mes estuve parado y encerrado por la pandemia. Al principio, fue un shock, más en lo psicológico que en lo físico Pero cuando pude volver al agua, en dos o tres días volví al ritmo. No lo sentí tanto”, explicó. Y agradeció a sus patrocinadores por no soltarle la mano, en especial a su main sponsor Quiksilver.
Con Tokio 2020 como principal objetivo, ya que el surf será olímpico por primera vez, Muñiz expresó que «como vengo de un deporte individual donde por lo general viajás solo, la experiencia en la villa panamericana en Lima fue muy especial para mí… Estar en contacto con otros deportistas, de otros países… Fue especial y me encantaría volver a vivir todo eso en Tokio». (Télam)