En el marco de la sesión ordinaria del Honorable Concejo Deliberante, el concejal y presidente de Acción Marplatense Santiago Bonifatti se refirió a la problemática del trabajo informal en el partido de General Pueyrredon, a raíz del cierre masivo de panaderías en Mar del Plata.
Al respecto, Bonifatti señaló que en la reciente reunión que mantuvieron con el Centro de Industriales y Panaderos, la Asociación y el Sindicato, «nos manifestaban esta problemática en la que se encuentran en la que van cerrando panaderías del mundo formal y se sigue consumiendo la misma cantidad de pan que antes; no es que se fabrica menos pan sino que el mercado informal avanza sobre el formal por los costos y por la competencia desleal«.
El edil reconoció que «sobre la presión fiscal no podemos hacer mucho desde el Concejo, pero si sobre la forma en que el Estado ejerce los controles. Y ahí había una sensación en la gran mayoría de los panaderos de que siempre se controla a los mismos que son los que están identificados y que muchas veces el control tiene más que ver con una cuestión sancionatoria y recaudatoria que con una mejora de la salubridad de las personas que reciben esos productos».
El edil de Acción Marplatense aclaró que «cuando pedimos más control de ninguna manera estamos queriendo ir contra aquellos pequeños o micro productores barriales que están alimentando su economía personal y familiar, sino que queremos ir contra los industriales clandestinos, contra aquellos que producen cientos kilos de pan por día y que están compitiendo deslealmente contra los industriales formales. La problemática detrás del cierre de panaderías no puede ser invisibilizada.»
Para finalizar, Bonifatti habló sobre la problemática de la venta informal en Mar del Plata. «Los datos de la UCIP sobre la informalidad en el Partido de General Pueyrredon son alarmantes, no solamente en el rubro de las panaderías. Los datos dicen que más de la mitad del comercio es informal y ahí perdemos todos. No sólo quienes no compiten, sino que perdemos todos como economía local, porque no se tributa, los empleados están en negro y finalmente ese dinero está generando una economía informal de la cual no se puede tener ningún tipo de control».
«El Partido de General Pueyrredon debe tener una una política muy estricta con aquellas grandes industrias que en la clandestinidad le compiten a los industriales formales y nunca tratar de perseguir a aquellos que están intentando llevarle el sustento a su familia con micro o pequeñas producciones», sentenció.