Finalmente, la justicia imputó a Marcos y Matías Peuscovich, ambos hermanos que son los dueños de la compañía En Vivo, encargada de la organización del show que se llevó a cabo en Olavarría el sábado pasado y dejó dos víctimas fatales.
Si bien Carlos Solari y Ezequiel Galli participan como testigos en la causa, los hermanos Peuscovich podrían ser acusados de estrago doloso, cohecho (si se comprueba corrupción) e incluso por homicidio culposo. Además, fuentes del caso adelantaron que la Justicia podría impedirle en las próximas horas la salida del país.
Susana Alonso, fiscal de Olavarría a cargo del caso, caratuló la causa por ahora como «averiguación de causales de muerte«. También ordenó allanamientos el día posterior al recital en las habitaciones de los hoteles de Matías y Marcos.
Cabe destacar que, según el contrato que En Vivo firmó con el Municipio de Olavarría, la productora se hacía responsable de la seguridad y la atención sanitaria dentro del predio La Colmena, donde se hizo el recital.
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